"La violencia contra la mujer es un gran problema que no solo tiene
enormes consecuencias en las víctimas directas. Además, perturba todo
el ámbito familiar, y atenta contra el desarrollo integral de los niños y
las niñas.
Utilizando datos de la Encuesta Demográfica y de Salud Familiar
(ENDES), este estudio estima el efecto que tiene la violencia de género
sobre la probabilidad de que los niños y las niñas repitan el año
escolar.
La violencia en el hogar genera un clima de tensión que impide el
normal desarrollo cognitivo y de habilidades de los niños y las niñas.
Al mismo tiempo, las madres víctimas de violencia tienen menos
capacidad de brindar a sus hijos el cuidado y la atención que necesitan,
lo cual contribuye a reducir el desarrollo de las habilidades de los
niños y las niñas. Estos dos efectos suelen reflejarse en un desempeño
escolar más pobre en comparación con el de sus pares que no sufren este
problema. Por otra parte, el estudio no encuentra evidencia de que la
violencia doméstica contra la madre tenga un efecto diferenciado entre
las niñas y los niños".